Managua, Nicaragua, 14 de Septiembre 2016
Reciban un cordial saludo de paz.
La ecología, el respeto a la vida humana, su dignidad y libertad y la paz son elementos fundamentales y esenciales a una propuesta de justicia ecológica e Intra generacional e inter generacional incluyente.
Las Once propuestas desde el Ambientalismo colombiano para los equipos negociadores de la paz de Colombia (Habana, 2016) da pie para pensar y repensar amablemente y con respeto lo que un ciudadano de un País centroamericano ve desde afuera sobre el porvenir de un País que tiene historia de gloria y que su futuro está lleno de promesas grandes para sus ciudadanos.
Agradezco a la Alianza Verde de Colombia por tener la deferencia de hacernos enviar a través de nuestra Secretaria Ejecutiva Matilde Bajan el documento de forma oficial, ya que por las redes nos había llegado con otros formatos y el mismo contenido pero esta vez con el interés de que se conozca por la hermandad verde de las Américas y podamos contribuir con nuestras reflexiones y opiniones.
Desde ya reiteramos nuestro respaldo al pueblo de Colombia, a la Alianza Verde de Colombia, al Movimiento Ambientalista y a todos los actores comprometidos con la paz de Colombia. Amo Colombia y he visto su sufrimiento y en este hermoso momento en que se encuentra quiero expresarle mi total solidaridad en los esfuerzos que hacen y están llevando adelante por darle a Colombia y sus nuevas generaciones una nueva plataforma de nación y país posible.
Soy nicaragüense. Vi por primera vez el sol en mayo de 1968, gobernaban en Nicaragua los Somozas (1934 - 1979) una dictadura represiva, autoritario, excluyente, prebendario y absolutista. Durante todo este tiempo hubieron muchos levantamientos, alzamientos, tomas de armas pero los Somozas contaban con el apoyo de un ejército personal (guardia), una fuerza especializada (EEBB), aparatos de control y vigilancia (Seguridad Nacional y los orejas - espionaje popular, técnico y profesional). La dictadura de los Somozas dejó un saldo de 50 mil muertos y una economía destruida.
Luego vino la década del ochenta y el gobierno sandinista de este periodo decidió optar por ponerse del lado de uno de los imperios de la guerra fría: URSS, esto trajo como consecuencia una guerra de baja intensidad promovida por los EEUU y ejecutada por la Resistencia (contrarrevolución). El régimen de la década del ochenta, igual fue represivo, autoritario, vertical, guerrerista, violento y aplastante con miles de exiliados, no menos de 130 mil muertos y afectados por la guerra. Finalizado la década del ochenta, Nicaragua había pasado 54 años de conflictos, dictadura y guerra.
Luego vinieron los 15 años neoliberales (1990-2006) y la aplicación de las políticas neoliberales, la reducción del estado, la reducción de los presupuestos sociales, la privatización, el estado como facilitador del capital internacional. La tecnocracia metió al país en una vorágine de destrucción de bosques, desempleo, pobreza, violencia social, corrupción pública y desmantelamiento de las esperanzas de poder asegurar un Estado Social de Derecho.
Así desde el 2006 - 2016 hemos entrada en un proceso de desconstrucción de la institucionalidad democrática, des constitucionalización, desmejora significativa del respeto a los derechos humanos y las libertades públicas, desmovilización de la oposición política, una partidización de los poderes del estado, el ejército, la policía, control, vigilancia espionaje permanente a organizaciones políticos, líderes políticos y movimientos políticos no afines al partido de gobierno. Estamos de cara a unas elecciones no competitivas, sin observación electoral internacional, con una propuesta gubernamental de fortalecer un estado nepotista, autoritario, de dictadura institucional y dinastía represiva.
Desde 1934 hasta el 2016, Nicaragua no ha tenido la oportunidad de ser una Republica Democrática de Estado de Derecho. Los gobiernos de conservadores, liberales y sandinistas, que son los que han gobernado le heredan a las nuevas generaciones menos oportunidades, caminos, plataformas y esperanzas. Los únicos beneficiados reales son oligarcas, burguesías liberales, empresas transnacionales, empresarios nuevos, la elite gubernamental, del ejército y la policía. Los más afectados son el medio ambiente y los recursos naturales, los campesinos, las comunidades indígenas, la clase media profesional baja, los desempleados y la juventud. Hoy los partidos y movimientos políticos en Nicaragua se clasifican en 1) colaboradores y acomodados 2) Oposición 3) Resistencia. La Alianza Verde Ecologista está situada en la resistencia al proyecto de dictadura - dinástica, es lo menos ético que se puede hacer. El asistencialismo populista y prebendario no trae desarrollo sustentable y es desde este contexto que valoro los esfuerzos de paz en Colombia, las posibilidades de que ustedes puedan construir un país posible sustentado en la ecología, la vida, la libertad, la justicia, la democracia, la inclusión y el respeto a los derechos humanos. Este es el antecedente histórico de quien les escribe pero que asumió desde el año 2000 impulsar la propuesta verde en Nicaragua, con todas las limitaciones, los fallos y los retos que entraña.
REFLEXIONES VERDES A LAS “ONCE PROPUESTAS DESDE EL AMBIENTALISMO COLOMBIANO PARA LOS EQUIPOS NEGOCIADORES DE LA PAZ DE COLOMBIA” POR EDWARD SALAZAR CRUZ, PRESIDENTE DE LA ALIANZA VERDE ECOLOGISTA DE NICARAGUA. 14 DE SEPTIEMBRE DE 2016
De la lectura del documento y sus claros contenidos solo puedo decir con mucho respeto, a Colombia, que esta se debe animar en las siguientes líneas directrices que están inspiradas en las mismas propuestas:
1.- Una Colombia con sustentabilidad ecológica, social y humana
Fortalecer la Sustentabilidad Ambiental de una Colombia, que basada en sus experiencias históricas ecológicas, sociales y humanas, es capaz de construir una ética ecológica-social personal, colectiva e institucional que atiende oportunamente el cambio climático, la variabilidad climática, la tierra, la deforestación, la sequía, las montañas, las cuencas hidrográficas, bosques, minería, biodiversidad, océano y mar, agua dulce, desechos tóxicos, peligrosos, solidos, radioactivos, energías limpias, ciudades ecológicamente sustentables y que atiende oportunamente el fenómeno de los desastres naturales. Así, una Colombia amiga de su tierra, su agua, su atmosfera, su nación y su futuro, con justicia inter generacional y oportunidades para las presentes y nuevas generaciones.
Ello implicaría el compromiso de trabajar por:
2.- Una Colombia comprometida con los valores de eco- humanidad que aseguren el respeto a la vida, la dignidad humana, la libertad y su ejercicio sin amenazas y temores.
Una Colombia post conflicto, esta impelida a asegurar el respeto y cumplimiento de los Derechos Humanos y las Libertades Públicos, el respeto a los derechos de los pueblos originarios, las mujeres, los jóvenes, la niñez, los ancianos, las personas con discapacidades, el respeto a los derechos de las minorías sexuales y de las trabajadoras sexuales.
Tutelar el respeto a los derechos humanos y las libertades en un pacto común de la sociedad - estado - comunidades - ciudadanos.
3.- Potenciar una economía ecológica por el bien común de todas y todas.
Es claro que la economía de la guerra no puede ser superada por una economía neoliberal extractivista o una economía populista irresponsable. Solo será posible para Colombia salir adelante si aprende pedagógicamente de las experiencias económicas de la región y evita cometer los errores irreparables y ello demanda abrirse a los siguientes postulados:
4.- Un compromiso por una agenda de ecología Social y humana
Un balance general demanda un diagnóstico y estudio sobre el estado real de las prioridades estratégicas sociales, la seguridad alimentaria, nutrición, agricultura sustentable, erradicación de la pobreza, salud, políticas de población, ciudades y asentamientos humanos sustentables, igualdad y equidad de género, empoderamiento de las mujeres, promoción del empleo pleno y productivo, el trabajo decente, la protección social, al educación para el desarrollo sustentable, el transporte sustentable y las urgencias ecológicas sociales, ello implica a lo inmediato:
5.- De buena fe impulsar una agenda de ecología política que beneficie a la nación colombiana, al Estado y asegure los intereses supremos del País.
La democracia es el único camino para la paz, la sustentabilidad y la construcción de una ética personal, comunitaria, colectiva e institucional y es la única posibilidad de fomentar y asegurar la vida, la libertad, justicia intergeneracional y futuro colectivo. Ello implica:
6.- Ecología política regional (América Latina y el Caribe) y Ecología Planetaria
Colombia, es un país miembro de la comunidad de naciones latinoamericanas y caribeñas, así como del continente americano y del planeta tierra. Por ello su contribución a los procesos regionales, continentales y globales son valiosos y trascendentes y ello implica:
Fraternalmente,
Edward Salazar Cruz
Presidente Nacional
Alianza Verde Ecologista
Managua, Nicaragua